A estas alturas ya he entendido que algunas de las cosas que The godmother ha hecho durante este verano se quedarán en un cajón para siempre. En el cajón de los recuerdos de las personas que vivieron esos momentos. Este verano ha estado lleno de láminas de nacimiento, aniversarios, bodas, bautizos y comuniones. Lleno de momentos especiales de vuestras vidas en los que habéis contado conmigo y aunque no podré compartir en el blog todas y cada una de estas pequeñas historias, hay otras, que por diferentes motivos no quiero dejar de compartir.
Así que hoy en The godmother nos vamos de comunión!!. Sip, nos vamos a una de las comuniones en las que hemos estado presentes este verano, de hecho, sin dudas la comunión en la que he estado más presente, al menos, físicamente.
El pasado 15 de agosto Samuel, un cielo de niño, de esos que de lejos se ve que son más buenos que el pan, celebraba su primera comunión rodeado de su ‘family’, en la que, de rebote, me incluyo. Así que… si The godmother iba a estar presente en dicho sarao no podía faltar una mesa de chuches bien mona y personalizada para la ocasión.
Para el diseño de la imagen del evento me decidí por la clásica paloma con ramillete a la que rodeé de confeti de colores para darle un toque mucho más… by The godmother. Y esta explosión de color del confeti la trasladé también a los colores elegidos para las chuches.
Como siempre la personalización de la mesa de chuches llegó a todos los detalles, desde la guirnalda, cucuruchos para llenar de gomis, chocolatinas y bolsitas de confeti de colores!
Pero el detalle más molón fueron los comecocos de papel que personalicé para la ocasión, y que dependiendo del color y el número elegidos te invitaban a tomarte una chuche o a parar por un momento…
Qué os parece la idea?? Incluiríais en la mesa de chuches de vuestros peques unos comecocos como estos??