Soy de esas personas que se enamoran un poquito de cada cosa que hace. Cada pequeño proyecto que comienzo es un nuevo amor y a él dedico mis horas con una sonrisa. A veces me responde y otras resulta ser un amor no correspondido. Y muy, muy, de vez en cuando se produce el flechazo. Esto es lo que me pasó con las invitaciones que preparé para el bautizo de Matías. Vale que el señor Henry (nacido para una lámina de nacimiento) me tiene ganada desde el minuto cero, pero verlo convertido en invitación de bautizo me produjo tal sensación de ternura… tanta dulzura, que por más que trate de explicarlo no lo lograría.
La mamá de Matías quiso cambiar las tonalidades arena del original por una gama de grises, gran acierto por su parte.
Con este mismo formato hemos visto en el blog varias invitaciones, entre ellas las del primer añito de Aroa y la de la comunión do Elena. Además, en The Goodies Shop podéis encontrar este formato de invitación en el modelo ‘Little birds’, aquí. Si, como la mamá de Matías, tu también tienes alguna petición especial, no dudes en ponerte en contacto conmigo y en menos que cantan esos pajarillos tendrás las invitaciones personalizadas a tu gusto.
Y vosotros que pensáis? es o no esta invitación de bautizo la más dulce que se ha pasado por The godmother hasta el momento?
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