Hace unos días mi amiga Laura estaba de cumpleaños y una vez más, yo me veía en la difícil tarea de encontrar el mejor regalo al mejor precio. Pero además en esta ocasión me apetecía regalar algo diferente. Así, recordando alguna de nuestras largas charlas (gracias por estar siempre ahí) diseñé una lámina llena de optimismo para ella.
El mensaje es claro…
Así de bonito quedó enmarcado, y yo sé que ella entendió todo lo que no está escrito.
Además,para completar el regalo personalizado, y por eso de que el DIY está muy de moda, hice un poco de costura en papel kraft, con este resultado tan gracioso.