Hay momentos en la vida de una persona, de una pareja o una familia, que quedan grabados para siempre en sus memorias: hora exacta, día exacto, lugar exacto. Hoy nos vamos a centrar en uno de esos momentos felices que lo cambia todo en la vida de una familia.
En este caso, la vida de los papis y la hermanita mayor de Martín. El 3 de octubre de 2014 a las 16.10h sus relojes se pararon y el mundo dejó de girar, o tal vez lo hizo más rápido, pero ellos no lo notaron. Ese día a esa hora su vida cambió para siempre. Y en ese cambio basé toda la decoración del bautizo de Martín, desde la zona de bienvenida, con un calendario y un pequeño reloj, a la decoración del comedor y la mesa dulce.
Hacía mucho tiempo que esta idea rondaba mi cabeza, exactamente desde el día en el que preparé el post el anuncio (podéis verlo aquí). Desde entonces, cada vez que preparaba una lámina de nacimiento personalizada la misma idea estaba presente; la llegada de Irea cambió la vida de Analia y Xabi, la de Helena la de Samuel y sus papis, la de Juan la de Julia y los suyos… Un día, una hora y una »cosita» pequeñita que con su llegada lo cambia todo…
Este ha sido el primer evento de 2015 y para mi está lleno de significado. Desde aquí doy las gracias a Mili, la tía de Martín, que además de dejarme libertad absoluta para la decoración, me ha cedido parte de las fotos bonitas que veis.